ientras el precio de la carne vacuna al consumidor sigue acumulando bajas, debido al menor consumo, el mercado ganadero sigue con atención el desempeño de la cotización del ternero y revalorizando las categorías de cría.
De acuerdo con el relevamiento de precios minoristas realizado por el Instituto de Promoción de Carne Vacuna Argentina (IPCVA), los valores promedio de los distintos cortes de carne vacuna registraron en junio un retroceso del 0,3% mensual, que se suma a una baja del 0,5% durante el mes de mayo. No obstante, en términos interanuales el incremento que acumulan los precios de la carne vacuna (52,6%) sigue superando en casi 10 puntos la variación general de precios (42,8%) .
En los eslabones ganaderos de la producción de carne también hubo movimientos, en especial en términos de la reposición en la que la brecha entre el ternero y el novillo llegó a superar el 30 por ciento. Según datos del Rosgan (mercado de Rosario), el precio promedio del novillito para consumo registró en los últimos 12 meses (medido a junio) del 50,9%, es decir unos 1,7 puntos porcentuales menos que el aumento reflejado en los precios de la carne al mostrador.
Sin embargo, el valor pagado por el ternero de invernada se vio incrementado en más de un 80% en el mismo período.
“Si medimos estas mismas variaciones a dólar oficial y a dólar paralelo, no existen dudas de la oportunidad de compra que ha estado ofreciendo la hacienda en los últimos meses”, observan desde el recinto ganadero.
En este escenario, y de cara a fin de año cuando la oferta de terneros tenderá a caer, la necesidad de seguir resguardando el capital mantendrá la hacienda en un lugar altamente valorado tanto por ganaderos tradicionales como por inversores ajenos al negocio.
“Esto nos hace suponer que la tensión vista en el precio del ternero seguirá vigente incluso sostenida, a su vez, por el valor que están recobrando los vientres para cría”, aseguran desde el Rosgan, donde perciben como limitadas las posibilidades de recuperación del precio de la hacienda terminada.
Qué puede pasar
Ante este panorama cabe preguntarse, ¿tiene la cadena margen suficiente para seguir ajustando internamente estas subas sin disparar el precio de la carne al mostrador?
Según el mercado rosarino, el mayor nivel de inversión que está recibiendo el sector, aún por motivos de protección del capital, ha sido largamente esperado por el sector aunque nunca debe dejar preservar el equilibrio de aquello que genuinamente admite el negocio.
De lo contrario –admite el informe–, las distorsiones de corto plazo pueden generar efectos no deseados en una cadena productiva cuyos ciclos naturales demanda un mayor tiempo en corregir.