Desde el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) se convocó a Andrea Marcos –veterinaria y Coordinadora General de la Dirección de Epidemiología y Análisis de Riesgo del Organismo y Punto Focal para Fauna Silvestre por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) – para que conteste algunas de las principales consultas sobre la importancia de notificar enfermedades de los animales a este organismo sanitario.
¿En qué consiste la campaña “Avisá al Senasa”?
Esta campaña está destinada a que tanto el público crítico –veterinarios y productores– como la población general conozcan cuáles son las principales enfermedades de los animales para estar atentos, reconocerlas y poder dar aviso al Senasa. Entre ellas, algunas de mayor relevancia son fiebre aftosa, peste porcina clásica, encefalopatía espongiforme bovina, influenza aviar, enfermedad de Newcastle, rabia, triquinosis y síndrome respiratorio reproductivo porcino (PRRS). Para reconocerlas, el Senasa irá informando por etapas cuáles son las características de estas enfermedades y cómo notificarlas en cada caso.
¿Cuáles pueden ser las consecuencias de no notificar una enfermedad a tiempo?
Estas enfermedades quizás se consideran distantes para el público general, alejado de las particularidades de la vida rural y el sector agroindustrial. Sin embargo, probablemente muchos recuerden situaciones como la del año 2003 y la influenza aviar, principalmente en el sudeste asiático. Este virus de las aves causó enfermedad en humanos, provocando incluso la muerte de al menos 100 personas. Este tipo de experiencias nos muestran hasta qué punto pueden llegar las enfermedades de los animales, la importancia de su control y especialmente de su notificación temprana.
¿Cómo se debe notificar una enfermedad?
Frente a la aparición de signos clínicos que puedan estar asociados a alguna enfermedad de alto impacto se debe comunicar a la oficina del Senasa más cercana personalmente o por teléfono –las ubicaciones se pueden consultar a través del correo cggr@senasa.gob.ar o del teléfono (0054-11) 4121 5137/5398–. De esta manera los veterinarios del Senasa se pondrán en conocimiento del caso y evaluarán cuáles son las acciones que se deberán seguir. Quien hace la notificación puede solicitar que su denuncia sea registrada por escrito y recibir una copia como comprobante. Además, se están desarrollando nuevas metodologías para facilitar este proceso a través de una aplicación para celulares y desde la página web del Organismo. Por otro lado, quienes tengan consultas pueden escribirnos a epidemiología@senasa.gob.ar o contactarse directamente con la Dirección de Epidemiología y Análisis de Riesgo a través del teléfono (0054-11) 4121-5405.
¿Cuáles son los beneficios para los productores?
Actuar de manera rápida ante la aparición de signos clínicos minimiza las consecuencias y optimiza la intervención, posibilitando controlar la enfermedad antes de que se establezca y disemine.
El principal beneficio de la notificación temprana es limitar el avance de las enfermedades con todas las consecuencias que esto puede implicar para las producciones, en el comercio internacional, la transmisión de enfermedades a las personas y, en ciertos casos, el impacto en la biodiversidad.
El Senasa dispone del personal capacitado para la atención de estos eventos y de los laboratorios que permiten identificar las patologías más importantes. Por eso, los productores, los veterinarios y la población en general deben tener en cuenta que cuanto antes se recibe información sobre un evento sanitario, más temprano puede evaluarse, atenderse y contenerse una eventual situación de riesgo.
¿Cuáles son los principales reconocimientos internacionales otorgados a la Argentina a nivel sanitario?
Los programas sanitarios que ejecuta el Senasa son el sustento para el desarrollo de las producciones agroindustriales de la Argentina. A través de la prevención, el control y la erradicación de enfermedades –y de la fiscalización y certificación de producciones–, nuestro país mantiene estatus sanitarios que cuidan e impulsan el crecimiento del sector agroindustrial.
Estos estatus oficiales otorgados por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) son: país libre de aftosa (con 2 zonas donde se aplica la vacunación y 3 zonas sin vacunación); país de riesgo insignificante de encefalopatía espongiforme bovina; país libre de peste porcina clásica; país libre de peste de los pequeños rumiantes; país libre de peste bovina; país libre de peste equina; país libre de perineumonía contagiosa bovina. Estos estatus nos brindan una situación sanitaria privilegiada que abre para nuestro país la puerta de los mercados internacionales más exigentes y nos permite garantizar la producción de alimentos de origen animal para consumo interno.