La Federación Agraria Argentina emitió un comunicado en el que se mostró muy crítica con las medidas que anunció en los últimos días el Gobierno y el contexto económico, incluida la suba del dólar que hoy tocó el pico de $24,50 en horas del mediodía.
«Vivimos horas de incertidumbre ante la suba del dólar, la corrida financiera, la discusión por las tarifas, la remarcación de precios y los anuncios de un nuevo préstamo del FMI», indicaron, y destacaron que «los pequeños productores no estamos ajenos a las variables de la macroeconomía, y nuestro futuro depende de cómo se resuelva esta coyuntura».
Ante las críticas de personajes de la política como Elisa Carrió, que reclaman por la liquidación de divisas del sector, la entidad hizo énfasis en que «no somos todo lo mismo, están los que tienen espalda más grande y pueden vender según cómo se acomodan los mercados, y estamos los chacareros, que apenas finalizada la cosecha cubrimos deudas y afrontamos el costo de la próxima siembra, los que tenemos que alimentar a nuestro rodeo u ordeñar nuestras vacas sin especular con el valor de las tasas o el dólar«.
«Además, si existe retención de divisas, se debería apuntar al puñado de empresas agroexportadoras que domina hace años el comercio de granos, a las cuales este mismo Gobierno nacional les liberó de todo compromiso en cuanto a los plazos para liquidar dólares».
También hicieron hincapié en la necesidad de promover políticas públicas para quienes agregan valor en origen, «para los que damos vida a nuestros pueblos, para las pymes que podemos quedar al costado del camino por la suba de tarifas y combustible, o por el aumento de las importaciones; en definitiva, para los quecreemos que un país se construye en base a la producción y no a la timba«.
«Hablan de más devaluación y mejorar el precio de nuestras exportaciones como única salida», sostuvieron, pero advierten que «si no se piensa en el impacto de los costos de producción y la baja en la capacidad de consumo de la población, una medida así sólo ayudaría a profundizar la concentración económica«.
Sobre el final, se refirieron a las negociaciones del Gobierno con el FMI y reiteraron su posición: «Si un préstamos stand by que sirva para respaldar las Lebac, tiene su contraparte en un recorte de programas de desarrollo e investigación, o de ajuste y privatización de tareas en INTI, INTA o Senasa, o el ajuste por vía de frenar obras de infraestructura, reducir salarios y jubilaciones, entonces sería un acuerdo que atentaría contra el desarrollo y la soberanía nacional«.