Con este sistema, el potrero está disponible para el pastoreo durante más de un mes. La clave es no pasarse de la fecha de siembra.
Los verdeos de invierno diferidos son una valiosa herramienta en la cadena forrajera ya que permiten disponer de una gran cantidad de pasto en momentos en que las pasturas perennes presentan baja disponibilidad de forraje.
La siembra de gramíneas anuales para producir forraje de alta y buena calidad y cubrir las deficiencias producidas en el invierno (verdeos) se realiza normalmente a fines de febrero y principios de marzo y los animales lo consumen a diente a los 45 ó 50 días en 4 ó 5
pastoreos.
FECHA DE SIEMBRA. En el caso del diferido, la fecha de siembra es la misma pero el aprovechamiento se realiza a los 120 ó 150 días y de una sola vez. Técnicos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria de Coronel Suárez (en el sudoeste de la provincia de
Buenos Aires) concretaron un estudio de caso con resultados que le permitieron cubrir la necesidad de alimento de un rodeo de cría. “La idea es diferir el pastoreo del verdeo hacia el invierno para acumular mayor cantidad de forraje”, resumió el jefe del INTA Coronel Suárez, Darío Morris.
La siembra se realiza con una sembradora de grano fino y la recomendación principal es no retrasar la fecha de la implantación
de fines de febrero o principios de marzo. “En este momento se dan dos condiciones muy importantes: temperaturas moderadas y buena provisión de agua. Con esto se logra una buena implantación y altas tasas de crecimiento de forraje”, explicó Morris. Luego, se trata de respetar los días de clausura y, de esta forma, asegurarse una alta acumulación de forraje en una época de escasez, dándole estabilidad al sistema de producción.
ESTUDIO. El INTA Coronel Suárez llevó a cabo el estudio del manejo de un verdeo diferido (avena) en el campo Las Golondrinas distante a 15 km de la ciudad de Coronel Suárez, del productor Mario Schwindt que cuenta con una superficie de 105 hectáreas.
La base forrajera está integrada por pasturas de base alfalfa que se complementan con verdeos anuales, tales como avenas diferidas, cebada forrajera y avena – vicia. El productor realiza cría bovina y ovina y la carga media del establecimiento es de 1 equivalente vaca por hectárea (EV/ha).
La avena se destacó como lo más recomendable para la práctica de verdeos de invierno diferidos, ya que aún en grano no pierde calidad. En el ensayo se tomó como medida la unidad ‘equivalente vaca’ (EV), es decir, el promedio anual de los requerimientos de una vaca de 400 kilos de peso que gesta y cría un ternero hasta el destete a los 6 meses de edad con 160 kg de peso, incluido el forraje consumido por el ternero.
El verdeo se sembró el 28 de febrero de 2018 en siembra directa. La densidad de siembra fue de 90 kg/ha de avena. A los 120 días (1 de junio) con la avena encañada se comenzó a pastorear las parcelas. El rendimiento del verdeo fue de 7.500 kg de ms/ha con 30% materia seca. El pastoreo se realizó a partir del 1 de junio y hasta los primeros días de setiembre, en parcelas diarias durante 3 horas.
RESULTADOS. De acuerdo con las evaluaciones realizadas por los técnicos del INTA Coronel Suárez, se llegaron a las siguientes conclusiones:
-Con el pastoreo de la avena “diferida” se mantuvieron los 60 EV durante 90 días en 8 hectáreas, en los cuales las vacas de cría mantuvieron su condición corporal.
-El consumo por vaca fue de 4 kilos de materia seca/hora y, de acuerdo a los resultados de los análisis de la calidad del verdeo, este forraje permitió cubrir los requerimientos nutricionales de las vacas de cría.
-El pastoreo se concretó con una eficiencia de cosecha de 75%. Morris reforzó que la digestibilidad de la avena madura “no bajó” aunque, comparado con un verdeo manejado en forma convencional, se redujo algún porcentaje de proteína. “Así y todo puede cubrir muy bien los requerimientos de una vaca de cría”, señaló el especialista.
CALIDAD DEL VERDEO DIFERIDO DE AVENA: Proteína bruta 10%; Digestibilidad 74%; Energía Mcal/Kgms 2,70.
Por Gabriel Quáizel para Super CAMPO.