El rol de la mujer toma protagonismo y vuelve a pensarse desde diferentes perspectivas y en variados ámbitos. En la 132° Exposición de Ganadería, Agricultura e Industria de Palermo, el debate no pasa desapercibido. Allí, las mujeres del campo pudieron compartir sus experiencias y plantear los desafíos del futuro.
En la jornada «Mujer Rural, nuevos desafíos, prioridades y experiencias«, que realizó la Sociedad Rural Argentina (SRA) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en el marco del G-20 que sesiona en Buenos Aires.
Durante la apertura, Victoria Zorraquín, directora de Innovación Tecnológica para Pequeños Productores del Ministerio de Agroindustria nacional, habló de la importancia de la mujer en la agroindustria, y destacó que «cuando se recorre el país, se siente y se vive el latir de la mujer en cada rincón de Argentina».
«Hay mujeres despertando pueblos, preocupadas por los caminos rurales, por la aplicación de fitosanitarios, detrás de las escuelas y poniéndose al frente», dijo, y agregó que «si no posicionamos a la mujer, nos estamos perdiendo toda su riqueza».
La presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres, Fabiana Tuñez, también participó de la jornada en el panel de «Políticas públicas y ámbito legislativo en Argentina», donde compartió conceptos y desafíos con Cristina Antúnez, coordinadora de Equidad de Género, Diversidad Sexual e Igualdad de Oportunidades del Ministerio de Trabajo.
Para Antúnez, el desafío es instalar y mantener en la agenda pública y política la importancia del acceso a los derechos económicos y sociales por parte de las mujeres y posicionarlas en condiciones de igualdad respecto de los varones en el ámbito laboral.
Otro panel fue el de «Testimonios y situación actual de la mujer rural en Agentina», del que participó la directora de la SRA, Adela Nores, junto con Fabiana Menna, de la Fundación Gran Chaco; y con la compañía de Roxana Marconi, dirigente de Coninagro, y María Herminia Rabasedas y Bettina Ebinger, productoras agropecuarias.
«La brecha de género en la agricultura sigue existiendo y eso imposibilita el acceso equitativo a los recursos y los servicios productivos», dijo Adela Nores, y destacó que «afortunadamente, hay un nuevo movimiento de mujeres que van hacia el campo».
Para Nores, por diversas causas hay muchas mujeres que se están haciendo cargo de las empresas agropecuarias. En esa línea, destacó cuatro temas pendientes centrales: caminos rurales, electrificación rural, conectividad y agua potable. «El país es grande y complejo, pero lo podemos lograr», concluyó.
