Entrevista a Jorge Dimu, broker de carne
El broker de carnes, con una extensa trayectoria dentro del mercado, tanto en la exportación como en la importación, con énfasis en la ovina, sostuvo que el mercado internacional “todavía no se ha acoplado a lo que debería de ser”, y si bien China aún está bajo, hay otros mercados que están resurgiendo. Para carne vacuna visualiza un mercado con una demanda fuerte de Brasil, premiando si es de origen Angus, a Estados Unidos que se encuentra con problemas internos de producción, que lo lleva a demandar mayor cantidad de carne, con lo que comprará fuera de la cuota también. Y apuesta a México, donde ya se encuentra trabajando para concretar la exportación de un contenedor mensual. Visualiza un segundo semestre muy bueno en la demanda de los productos uruguayos. Lo que sigue es lo sustancial de una conversación con Rurales El País.
—¿Cómo está viendo el panorama para la carne ovina en el mercado internacional?
—Veo un cambio sustancial en la demanda internacional, que todavía no se ha acoplado a lo que debería de ser, ya que todavía China está muy bajo, pero tenemos países que están resurgiendo y demandando como es el caso de Medio Oriente, Israel y Brasil.
—¿Cómo podemos contextualizar ese resurgimiento?
—Creo que la post pandemia ha perjudicado muchísimo el consumo en general. Indudablemente el consumidor brasilero que estaba demandando de otros lugares, como Chile, ha dejado de demandar de ahí y demanda de Uruguay, no son las cantidades demandadas hace tres años atrás, pero sí de forma constante de cortes ovinos y corderos especiales, es decir no carcasas de adultos ni de animales jóvenes, sino de carcasas de animales que llamamos cordero pesado, de muy buena calidad y terminación.
—¿Al mercado de Brasil cómo lo observa?
—Aún persisten algunos problemas en frontera, en algún momento tuvimos algunas dificultades en Yaguarón, hoy los tenemos en el Chuy, hay una huelga de los funcionarios del Mapa que trancan los camiones, por una coma o una rayita, lo que se solucionaría con un ajuste salarial, es un problema interno brasilero que nos está perjudicando, pero indudablemente eso trae aparejado un costo mayor, porque un camión 10 o 12 días en frontera cuesta mucha plata.
—¿Debería de pasar esto en el Mercosur?
—No, no podría pasar, siempre fui un luchador del Mercosur, pero siempre hay cosas internas de cada país que nos llevan a estos problemas.
—Y cuando Uruguay importa de Brasil ¿Sucede lo mismo?
—Sí, se le llama problema espejo, ha sucedido y se han rechazado camiones, eso fue porque el ministerio no le encontraba solución a los parates que le hacía al Uruguay Brasil, y empezamos a parar algunos camiones, incluso se vieron perjudicados algunos de fruta, pero ese se fue solucionando.
—En cuanto a China, que lo definía como bajo en su demanda, ¿Qué expectativas hay mirando este primer semestre del 2024?
—Creo que en este momento se está cargando algo de lo que es ovinos pesados, donde los valores no son muy buenos. Hay que entender que China es un gran productor de ovinos, pero un gran consumidor, por la población musulmana que tiene, que son cientos de millones. Indudable que la post pandemia ha traído perjuicios en China y todavía lo mantiene, pero va a ser un mercado a futuro donde me pregunto ¿Vamos a tener para mandar mercadería? Porque cada vez tenemos menos, hoy tenemos menos de 6 millones de cabezas, y eso es una alarma.
—¿Se imagina una actividad de China por carne ovina similar a la que tuvimos en el ejercicio 2021/2022?
—Creo que va a volver, el mercado va a volver, China no va a dejar de comer, va a mejorar la situación, pasará un año, pasarán dos, pero nuevamente tendremos una demanda muy importante como la tuvimos, y con valores muy buenos para el exportador uruguayo. Y una cosa muy interesante, es que China ha estado llevando carcasas adultas y también jóvenes en su momento, pero lo principal sería poder habilitar plantas para que puedan exportar con hueso a otras regiones que no estamos habilitados, porque en parte fracasó lo que era el cordero de corral a Estados Unidos, pero si hubiéramos tenido la posibilidad de mandar cortes sería otra cosa, y después luchar por tener la comunidad europea que ahí tendríamos una demanda muy firme, y les doy un ejemplo: Chile vende el french rack a US$ 25 y le estamos vendiendo a Brasil a menos de US$ 20.
—Hace poco se habilitó el mercado de Israel para la carne ovina con hueso ¿Qué oportunidades ve en este mercado?
—Veo un mercado interesante, están faenando Kosher, que es el delantero, sobran el trasero y el rack, pero para eso tenemos mercado acá al lado o en otros lugares del mundo. Brasil está con una demanda tremenda, y nosotros estamos debiendo mucha carga a ese destino.
—Pasando a temas de nuestro país ¿Cómo ve el mercado interno?
—El año pasado fue un año excepcional para el mercado interno, para el cual nos movimos nosotros, fuimos los creadores junto con Bamidal y la empresa Santa Clara, y el consumo se multiplicó por dos o por tres, fue fantástico. Hoy hay una demanda no por carcasas, sino que por cortes ya hechos, ya el animal como lo industrializan las plantas para venderlo en el exterior, es decir: el french rack, el pescuezo feteado, la paleta y el asado, eso facilita al consumidor a comprar las porciones, en cambio la carcasa es más difícil, pero hubo una venta excepcional, y creo que este año va a continuar ya que el ovino está por debajo del precio del vacuno.
—¿Visualiza un escenario donde nuevamente el precio del cordero llegue a superar el precio del novillo?
—Eso depende del precio que llegue el novillo, hoy he escuchado que sigue aumentando a pesar de que se ha bajado la faena, pero también hay más demanda. Veo que el ovino había estado en un precio muy bajo, algo va a ir subiendo, ira compensando de acuerdo a la demanda.
—Mirando a nivel productivo ¿Cómo ve la situación? ¿Cree que debería de existir una tendencia a producir más en razas carniceras teniendo en cuenta lo que pasa en lanas medias y gruesas?
—Lo de la lana es una cosa increíble que sucedió, creo que ha mejorado un poquito ahora, pero habría que buscar los dos negocios: la lana y lo fundamental es la carne, que es lo que le da valor al ovino, indudablemente hay que buscar razas que sean de crecimiento más rápido, y se nota la diferencia, nosotros vemos el rack, ya sabemos de que raza es, hay diferencias. Hay que buscar de tener mayor cantidad porque no podemos estar con esto, cuando yo arranqué había más de 25 millones de ovinos, y hoy tenemos menos de 6 millones, y en alerta lo vengo diciendo desde que teníamos 10, 9 u 8 millones, es decir, cada día estamos en una peor situación. Hay que educar a la gente, educar al productor, tiene problemas con los robos, con los perros y los funcionarios, hay que volver a tener más ovinos…
—¿Hay camino fértil para aumentar el stock ovino en nuestro país?
—Creo que hay que aumentarlo, yo soy uno de los que está atrás de eso, y hay muchos consignatarios que están luchando para tratar de tener mayor cantidad de ovinos, no podemos quedarnos sin ovinos, hay otros países que se han quedado y tenemos que aprovechar ese espacio.
—En referencia a la carne vacuna ¿Cómo ve el mercado?
—Nosotros seguimos demandando, estamos demandando muy fuerte para Brasil, tanto carne de pasto como de grano, y se diferencia en el precio cuando es de origen Angus, hay una demanda muy buena de Brasil que no es solo picaña y tapa de cuadril, sino que también en otros cortes como fraldao, asado, bife ancho, bife angosto, es decir que hay una variedad que el consumidor y el supermercado brasileño está distinguiendo las carnes de gran calidad, y lo vemos acá en los restaurantes, los visitantes brasileros vienen a tomar vino y comer buenas carnes. Hay una demanda excepcional, y en estos momentos también está demandando Estados Unidos que está con problemas de producción, y tenemos un mercado que no está explotado por Uruguay que tenemos arancel cero, que es México, nosotros estamos hace varios días tratando de negociar para mandar un contenedor por mes.
—En lo que es México ¿por qué no se ha explorado más el mercado?
—Teníamos un problema sanitario, había inspectores que tenían que estar radicados en Uruguay, y que se le pagaba desde Uruguay, pero eso se subsanó y la dificultad mayor que tenemos es que no hay mercadería.
—En conclusión ¿Qué podemos esperar de este año para el negocio ganadero en nuestro país?
—El segundo semestre va a ser excepcional, muy bueno en la demanda para Uruguay.
Fuente: El Pais
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