El efecto del dólar llegó a la carne, con máximos de $54 para la categoría de novillitos livianos y récord de precios también en los demás segmentos rematados este martes en el Mercado de Liniers. Toda la hacienda que abastece el consumo interno -novillos, novillitos, vaquillonas y terneros- aumentaron en promedio un 8%, respecto del viernes, la última jornada de referencia, porque el lunes la comercialización había sido insignificante.
El periodista especializado Silvio Baiocco, de Canal Rural, destacó que «hay muchos inconvenientes para conseguir hacienda desde la semana pasada, a partir de que el tipo de cambio pegó un salto«.
Es una ley de la economía: la escasez eleva los precios. En ese contexto, los representantes de frigoríficos y supermercados, que representan a la demanda en el Mercado de Hacienda, privilegiaron el abastecimiento «a cualquier costo». Actuaron convencidos de que en los mostradores y góndolas carniceras hay margen para aumentar los valores al público. Y quizás también suponen que el valor de la hacienda puede seguir subiendo. Por eso compraron todo lo que pudieron.
Todas las categorías superaron sus máximos históricos. También se destacaron como valores corrientes $52 y $53 para novillitos medianos y pesados. Hubo novillos de hasta 460kg en $51 y se destacó otra categoría de menos valor, la vaca, que cotizó entre $28 en el segmento «conserva inferior» y hasta $40 la vaca especial.
Otra referencia es que el martes de la semana pasada los referidos novillitos livianos, de entre 391 y 430 kilos, cotizaron $46 como máximo. Los $54 que alcanzaron hoy implican un incremento de 17,4 % en 7 días.
También puso en consideración Baicco que «la vaca, tanto para consumo como la de tipo conserva, volvió a saltar hasta un 10%, desde el viernes al martes, lo cual también está directamente vinculado con el fenómeno cambiario y con las expectativas de la demanda. Los compradores saben que las compras directas se han cortado, porque los productores ganaderos están viendo qué pasa y entonces se restringe la oferta. Esto es lo que quedó muy claro hoy».
Como también sucedió con los combustibles, los precios ganaderos son una expresión de que la devaluación impacta cada vez con más fuerza en los bolsillos. Frigoríficos y supermercados compraron fuerte la escasa cantidad de animales ofrecida y advirtieron que trasladarán esos valores en los mostradores al público
¿Otro síntoma de inflación? Los plazos para los mejores lotes fueron habituales, entre 14 y 21 días, pero los lotes de contado o con siete días de plazo fueron castigados con mermas de entre un 5% y hasta un 8% del precio, según la calidad del conjunto.