La faena de hacienda vacuna alcanzó el mes pasado el nivel de actividad más alto en 10 años. El volumen superó los 1,3 millones de cabezas, mientras que el consumo per capita volvió a caer y se ubicó en 51,7 kilogramos al año, según informó la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes (Ciccra).
En este escenario de mayor producción y de menor consumo doméstico, la participación de la exportación en los primeros 10 meses del año sobre el total de carne producida se ubicará en el punto más alto desde 1996, mientras que las ventas al mercado interno se posicionarán en el punto más bajo en ese lapso, precisa la cámara empresaria.
La faena en octubre se ubicó en 1.316.000 de cabezas, lo que “marcó el nivel de actividad más elevado desde 2009”, resaltó la entidad; en la comparación interanual significó un incremento de 8,7 por ciento que en números absolutos se traduce en 105.000 cabezas más que en octubre de 2018.
El 10° mes del año también fue el “cuarto más elevado entre los últimos 40 octubre; sólo los octubres de 2007 a 2009 exhibieron registros mayores, período en el cual el ciclo ganadero atravesó una de las fases más contractivas de la historia”, destacó Ciccra.
Esto permitió que en el acumulado entre enero y octubre de 2019 alcance las 11,45 millones de cabezas faenadas, lo que representó un incremento de 2,3 por ciento superior al mismo período de 2019.
Producto de esto, la producción de carne vacuna totalizó 2,586 millones de toneladas res con hueso, 1,1 por ciento más de lo producido en enero-octubre del año pasado.
Del total producido, el mercado interno absorbió 74,5 por ciento al alcanzar las 1.927.000 de toneladas res con hueso.
De esta manera, la participación del mercado interno entre enero y octubre cayó ocho por ciento con respecto a 2018, al contrario de lo sucedido con las exportaciones, que mejoraron ocho puntos en volumen con respecto al mismo período del año anterior.