Primero fue el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, al afirmar durante la Jornada Nacional del Agro de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) que el plan para potenciar las exportaciones nacionales estará enfocado en las carnes como producto principal.
Luego fue el propio presidente de la Nación, Alberto Fernández, quien destacó a la cadena cárnica por el armado de un plan de inversión de 187 millones de dólares para potenciar el mercado exterior.
Ahora, desde la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (Fifra) salieron a poner cautela ante tanto optimismo: si bien es cierto que la producción y las exportaciones han seguido creciendo con fuerza en los últimos meses, no dejan de haber obstáculos en el camino.
“Crecen las exportaciones pero en un contexto de fuerte baja de los precios internacionales de la carne y, al mismo tiempo, no se atiende la necesidad de respuestas de parte de la política para que mejore la competitividad sectorial. Por el contrario, crece la presión fiscal, lo que complica más el escenario”, resumió Daniel Urcía, presidente de Fifra, en su editorial mensual.
Pandemia
Un primer aspecto a tener en cuenta es que la pandemia de Covid-19 aún está lejos de ser un hecho que quedará en la historia, sino que sigue muy presente.
Según Urcía, las noticias que llegan desde China sobre los estrictos controles que se están haciendo para detectar el virus en packaging de alimentos “han puesto en alerta al sistema sanitario mundial”.
Esto tiene su impacto en los precios de la carne. “China compra más cantidad pero a menos valor”, repasó Urcía.
A la par, el rebrote del coronavirus en Europa provocó que también caigan las ventas y los valores exportados al viejo continente.
“Estas circunstancias que afectan al mercado externo pueden llegar a aminorar la producción que viene sostenida”, advirtió Urcía.
Impuestos
En el plano local, el mercado está bien abastecido y el problema que asoma es el fuerte crecimiento de los valores del maíz, que complican los números de los feedlots y obligan a un ajuste en los precios de la hacienda.
“Por la razón anterior y ante la situación de los mercados externos, desde el sector seguimos insistiendo con la reducción de los derechos de exportación a efectos de dotar de competitividad a los actores de la cadena cárnica”, manifestó Urcía.
Asimismo, señaló que desde Fifra les solicitaron a los diputados la inclusión del servicio de faena en la ley de IVA con alícuota reducida como parte de la ley de presupuesto, pero que esta opción “lamentablemente no fue considerada”.
“El pedido fue realizado a todos los diputados de los partidos de las provincias de Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba. El planteo fue expuesto en las reuniones de octubre pero pareciera que para las autoridades de la Comisión y de muchos de los integrantes del Congreso Nacional, la competitividad y transparencia de la actividad productiva carece de relevancia”, cuestionó el titular de la asociación frigorífica.
En esta línea, mencionó la preocupación por la decisión de algunas provincias de volver a subir las alícuotas del Impuesto sobre los Ingresos Brutos.
“Está harto demostrado que es acumulativo y distorsivo, que encarece la carne, genera artimañas evasoras o elusivas y resta competitividad a todo el sector. Debería estar en su mínima expresión si hubiera continuado la rebaja prevista en el pacto fiscal; es decir, un 0,5 por ciento. Por el contrario, están hablando de alícuotas muy por encima del 1,5 por ciento”, se quejó Urcía.
Y finalizó: “Desde el Consejo Agroindustrial Argentino se están haciendo denodados esfuerzos para generar acciones, propuestas, normas, que generen confianza para promover inversiones y fortalecer la actividad exportadora como actividad generadora de empleo y divisas. Muchos funcionarios lo comprenden y ayudan, otros todavía no y esas fuerzas contradictorias hacen que el estancamiento continúe. Ojalá podamos avanzar con cambios reales de paradigmas”.