El Covid-19 sigue afectando a los frigoríficos en Estados Unidos. Al 8 de junio se registraban por lo menos 23.500 casos confirmados y 86 muertos, según información del Midwest Center for Investigative Reporting, recogidos en 232 plantas procesadoras de carne en 33 estados del país.
Los fallecidos pertenecen a 37 frigoríficos en un total de 22 estados. La mayor cantidad de infectados se registra en plantas de la multinacional Tyson Foods, con 7.185 casos, seguida por JBS, con 2.642, y la firma Cargill con 607.
El cierre de por lo menos 40 plantas al inicio de la pandemia provocó escasez de carne vacuna, de cerdo y de pollo en supermercados de varios estados. Ante este panorama, el presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva para obligarlas a reabrir pero, pese a ello, la producción no se restableció del todo y todavía se encuentra un 36% por debajo de las cifras del año pasado, por lo que algunas cadenas de supermercados han limitado la cantidad de carne que pueden comprar los clientes.
La industria cárnica no es la única afectada por la pandemia. Según un nuevo estudio del Environmental Working Group, al menos 60 instalaciones de procesamiento de alimentos de otros sectores tienen brotes, con más de 1.000 trabajadores diagnosticados con el virus.
En Brasil
En Brasil, BRF deberá mantener cerrada su planta frigorífica de la ciudad de Río Verde, Goias, hasta el 21 de junio, según dictó un decreto municipal. En base a pruebas realizadas, las autoridades concluyeron que aún existe un gran número de contagiados con Covid-19 entre los trabajadores de la unidad.
Sin embargo, esta no es la única firma con problemas. El alcalde, Paulo do Vale, anunció que, a raíz de pruebas de diagnóstico mediante PCR, detectaron un fuerte aumento en el número de infectados entre los empleados de diferentes empresas de la ciudad.
Hasta el pasado martes, del 29% de las muestras analizadas en BRF, el 58,63% tuvo resultados positivos, de acuerdo con el decreto municipal que determinó la suspensión de las actividades de la empresa.
Las operaciones de BRF en la ciudad ya estaban suspendidas desde hacía dos semanas, con el retiro preventivo de todos los empleados, informó la empresa en un comunicado de prensa.
La firma realizaría pruebas adicionales a los empleados de la unidad, sumado a las que ya se llevaron a cabo en 8.600 trabajadores entre el 5 y el 7 de junio, según indicaron las autoridades sanitarias.
Fuente: Ganadería.uy y Carnetec