La Subsecretaría de Mercados Agropecuarios informó que en junio se certificaron 2.200 t de la cuota a Estados Unidos mientras que en julio hubo una triplicación a 7.150 t.
Ambas cifras pueden compararse con un promedio poco superior a 800 t en los primeros cinco meses del año.
Tal crecimiento se observó en las dos categorías de carne, es decir, enfriada y congelada. Las primeras pasaron de 350 t a 1.000 mientras que las segundas lo hicieron de casi 2 mil t a poco más de 6 mil t.
Los precios de importación de ese mercado habían mejorado desde abril/mayo, cuando se hicieron notar las dificultades de muchos frigoríficos para producir a causa de paralizaciones por el número de infectados por covid-19 entre sus empleados.
Esa época coincidió con menores precios en China, lo que potenció el interés de los exportadores.
En nuestro comentario sobre las exportaciones argentinas de mayo señalamos nuestra extrañeza sobre los bajos envíos a ese mercado, lo que se dio vuelta en junio.
Los datos difundidos por el ministerio anticipan un alto nivel de embarques en julio también.
Lo mismo ha sucedido en Uruguay, el otro mercado del Mercosur que puede enviar carne cruda a EE.UU. Las 6.500 t exportadas en promedio en el trimestre mayo-julio superan en un 80% al promedio mensual del primer cuatrimestre de este año.