En esta última semana de marzo, los valores de la hacienda comercializada en el mercado de Liniers se depreciaron entre 1 y 2%, acumulando entre 2 y 5% para machos y livianos en dos semanas. Las vacas lograron una pequeña valorización en estos 15 días.
Fue la sexta semana consecutiva con bajas para los livianos, las vacas atravesaron prácticamente el mismo camino, mientras que los novillos llevan cuatro de suaves de caídas acumuladas.
Estos movimientos se dieron en un contexto de ofertas abundantes, que superan en 15% al promedio semanal del último año. Cabe aclarar que esa tasa se ha ido reduciendo semana a semana, desde el pico de 24% a mediados de mes, hasta el 8% de los últimos cinco días de operaciones (dato estimado para toda esta semana en curso).
En cuanto a la comparación con los valores de hace 30, 60 y 90 días, hay bajas del 3 al 6% en un mes, aumentos de 2-4% en dos meses excepto para vacas y todavía se mantienen aumentos de 20-25% en tres meses, con las vacas nuevamente marcando una situación diferente, con +8%.
El precio deflacionado de los novillos
Con las bajas sucesivas que venimos comentando, el precio real del novillo también ha perdido fuerza, en un contexto todavía de alta inflación. En esta semana resultó 11% superior a la trayectoria de los promedios móviles de 52 semanas y 27% arriba del valor de hace un año.
El gráfico siguiente permite ver el deterioro en el último mes y medio.
Con un poco de perspectiva
El precio del novillo en marzo cayó dos puntos en términos deflacionados con respecto a febrero. Es decir, pese a haber logrado superarlo en 1% nominal, quedó sobrepasado por la inflación estimada de más del 3%.
Sin embargo, todavía resulta 30% más alto en términos reales con respecto a marzo anterior, gracias a un aumento nominal de más de 90% en este año. También supera en 2% al promedio del primer trimestre.
Consecuentemente, sigue en el nivel imperante en buena parte de 2016.
En una perspectiva de más largo plazo, si le damos un valor de 100 al mínimo de los últimos 20 años (noviembre de 2001) y de 300 al máximo (noviembre de 2010), el valor actual está en el entorno de 230, más cerca del tope que de aquel otro.
Conclusiones
En las últimas semanas se ha cerrado un poco la brecha entre el valor de la hacienda y el de la carne al público, tras el trabajo de pinzas del retroceso del de los animales vivos y continuos aumentos en el mostrador. Hoy, esa brecha es del 17%, cuando hace pocas semanas había superado el 30%.
Aún así, esta diferencia, que presiona a la baja a la hacienda, sumada a la buena oferta en Liniers en estas semanas, no ha logrado provocar una debacle mayor en las cotizaciones, como se pudiera haber pensado, lo que está hablando de cierta fortaleza en el mercado.