En la segunda semana de bajas en el mercado de Hacienda de Liniers, los precios se mantienen dentro de una tendencia de alzas, que responde básicamente a la distorsión en la oferta de los últimos períodos.
Desde los feriados de Carnaval, la mayoría de las semanas mostraron obstáculos. Dos semanas después se registró el paro de comercialización y en la siguiente hubo lluvias fuertes y generalizadas. En esta última, lunes y martes fueron feriados, además de la cuarentena. Si bien el sector de la carne está mayormente exceptuado, hay algunos problemas logísticos. Para ésta que comenzó, hoy martes es feriado y existía cierta confusión informativa ya que se había anunciado que el lunes sería no laborable pero no se plasmó en una norma.
La semana pasada, los precios de novillos y novillitos cedieron un punto, sobre los ya disminuidos de la previa. Las vaquillonas se sostuvieron mientras que las vacas retrocedieron dos puntos.
En la comparación con las cotizaciones de 30, 60 y 90 días atrás, se observan aumentos para machos y jóvenes superiores a la inflación en un mes y en dos (3-4% y 10-14%, respectivamente) mientras que pierden frente a esa variable en un trimestre (+4-9%). Las vacas muestran caídas nominales en las tres comparaciones, lo que se agrava si se mide en términos reales, aunque esto es propio de la estacionalidad de la categoría.
Ajuste por inflación
El valor real del novillo logró sostenerse por encima de la trayectoria de los promedios móviles de un año, por 23era semana consecutiva. Se ubica 5% por arriba de esta variable y 3% más alto que el valor comparable de hace un año.
El precio de marzo
El precio medio del novillo, de casi $91, resultó 1% mayor al de febrero, al de marzo anterior y al del promedio de lo que va de 2020. También fue 7% superior al promedio de 2019.
Si asignamos un nivel de 0 (cero) al mínimo de este siglo, que correspondió a noviembre de 2001, y de 100 al del máximo (noviembre de 2010), el precio actual se ubica en 70, es decir, considerablemente encima de la media.
Perspectivas de corto plazo
La oferta de hacienda, que podría incrementarse en las próximas semanas a causa del retraso que los obstáculos mencionados más arriba han provocado y que continuarán en cierta medida en ésta (feriado del 31) y en la próxima (Semana Santa), presionará sobre un mercado interno debilitado y fatigado.
A esto se sumará la pérdida de ingresos por la cuarentena y una demanda de exportación que empezó a sentir el efecto negativo de Europa antes que los positivos de la inminente recuperación china. Esa coyuntura tiene que afectar más al novillo que a otras categorías.
Con este panorama, es probable que la tendencia de afirmación de precios del novillo, que se arrastra desde fines de 2018, quede lastimada. Un factor podría alterar este pronóstico; se trata de la ayuda estatal a sectores de menores recursos, lo que dependerá de la velocidad con que llegue a destino y su cobertura.
Operatoria de emergencia en Liniers
Las autoridades del mercado han dispuesto que, mientras se extienda la emergencia, se recibirán animales los días lunes, martes y jueves para ser vendidos al día siguiente.