En la semana pasada, los precios de machos adultos y jóvenes comercializados en el mercado de Liniers mostraron incrementos, de 1 a 3%. Las vacas, por el contrario, una caída del 1%.
Tales subas suaves se registraron por tercera semana consecutiva, dando vuelta a la depreciación que se arrastraba desde mediados de diciembre.
El mercado reaccionó con cierta firmeza a pesar de la relativa alta oferta. Pese a que resultó 5% inferior al promedio semanal de un año, fue mayor que la de las tres previas que promediaron -23% frente a la misma variable.
Las comparaciones con los valores de 30, 60 y 90 días antes son positivas para machos y jóvenes. De entre 3 y 5% en un mes, 11-15% en dos y 14-18% en tres. Para las vacas, en cambio, sólo son favorables en un mes con el 3%, pero en dos y tres meses retrocedieron 4 y 6%, algo típico de la estacionalidad.
Ajuste por inflación
En cuanto al precio real del novillo, siguió fortaleciéndose en la semana, superando en 3% a la trayectoria de los promedios móviles de un año, aunque ubicándose 1% por debajo de la cotización de un año atrás.
En las próximas semanas veremos si la estacionalidad de febrero se repite, con nuevos picos, o si este año la saltea en virtud de haber entrado en 2020 con mayor vigor que en 2019.