La base de datos de gestiones productivas ganaderas del Movimiento CREA (con un total de 737 registros en tres campañas diferentes y para un total de 16 regiones del país), refleja un promedio de mermas preñez-destete del orden de 8,37% (Ver Figura N° 1).
“Al evaluar sólo ese dato parecería que el tema no representa un problema relevante. Sin embargo, el coeficiente de variación para el mencionado promedio es de 54,3%, con valores mínimos de mermas muy bajas (0,65%) y máximos extremadamente altos (45%)”, se asegura en un informe técnico publicado de manera conjunta por Zoetis y CREA el último diciembre.
Allí, los médicos veterinarios Eduardo Puente, Santiago Pérez Wallace y Antonio Castelletti (de la multinacional), junto al Ing. Agr. Juan Serre (asesor de la entidad que agrupa a productores), dejaron en claro que el porcentaje de pérdidas mencionado representa un problema que “puede significar todo el margen económico obtenible en la actividad ganadera”.
Confirmado: tenemos un problema
Considerando las mermas relevadas dentro del movimiento CREA, se realizó la estimación de los ingresos no percibidos por venta de terneros no logrados a causa de las mermas preñez-destete. Para ello, se tomó como referencia al rango de pérdidas correspondiente al cuartil superior y se estimó la diferencia de pérdidas de cada rango respecto al cuartil superior (Tabla 1).
Las pérdidas se calcularon tomando como referencia un rodeo de 100 vacas preñadas. Con un valor de $7.200 por ternero de 160 kg/cab, si las mermas se encuentran dentro del segundo cuartil, los ingresos no percibidos son de $19.440. Para el tercer y cuarto cuartil, las mermas significan $37.440 y $285.840, respectivamente.
Dimensionar las falencias técnicas
El primer paso en el diagnóstico del problema es identificar dónde se producen las pérdidas de terneros. A partir de ello se puede elaborar el plan de acción apropiado. Las causas tienen que ver con el manejo nutricional, sanitario y de gestión del rodeo, y la combinación de estos factores. Al ser un problema multicausal, la identificación, seguimiento y resolución del problema de las mermas debe ser un trabajo en conjunto del productor y el asesor veterinario.
En base a los resultados mostrados en la Tabla 1, se puede concluir que es posible reducir las pérdidas de terneros desde la preñez al destete a niveles del 5%. Para ello, es fundamental tener información del rodeo y así determinar los márgenes de mejora. Los principales indicadores reproductivos a registrar y monitorear inicialmente son los siguientes: porcentaje y distribución de preñez; porcentaje de pérdidas entre preñez y parición; y porcentaje de pérdidas entre la parición y el destete.
¿Qué factores afectan la preñez?
• Anestro postparto: vacas que no ciclan en la temporada de servicio.
• Factores nutricionales, pérdida de condición corporal en el último tercio de gestación, pérdida de estado durante el servicio.
• Enfermedades infecciosas siendo las principales: IBR (virus de la Rinotraqueítis Infecciosa Bovina), DVB (Diarrea Viral Bovina), Leptospirosis, Campilobacteriosis y Tricomoniasis, las cuales pueden ocasionar una muerte embrionaria temprana.
• Condiciones medioambientales, como el estrés calórico.
• Toros subfértiles: toros con mala calidad seminal y toros dominantes que no dejan trabajar a toros subordinados.
Diagnóstico y prevención
Junto con el veterinario asesor, el productor debe establecer un programa sanitario, que incluya diagnóstico y prevención de las enfermedades reproductivas. Es recomendable realizar por lo menos dos raspajes de los toros antes de que comience el servicio, para disminuir el riesgo de enfermedades venéreas (Campilobacteriosis y tricomoniasis), eliminando los toros positivos. Se debe realizar además análisis andrológico de los toros antes del servicio.
Teniendo un rodeo sano, el manejo nutricional es la variable de mayor peso en la determinación de la preñez y actúa de dos formas diferentes.
La condición corporal al momento del parto tiene relación con el anestro posparto, mientras que el estado nutricional de la vaca durante el servicio determinará la tasa de fertilidad de los celos.
Si las vacas paren flacas, la aparición del primer celo posparto se retrasará, al igual que la posibilidad de que la vaca se preñe. Esto no es un problema mayor para las que paren temprano, pero un rodeo con servicio estacionado, si se alarga el anestro posparto determinará qué muchas de las vacas que parieron tarde no tengan chances de preñarse.
Si la condición corporal al inicio del servicio es baja y no se cuenta con una base forrajera que permita una adecuada recuperación, una herramienta a considerar es manejar el destete anticipado.
Mermas preñez parición
Es la diferencia encontrada entre el porcentaje de preñez y el de parición.
Esta pérdida de terneros no debería ser superior al 4 o 5%. Para determinar el porcentaje de parición, se debe dividir el número de vacas paridas sobre el total de vacas servidas.
¿Qué factores afectan a la parición?
• Enfermedades infecciosas (como IBR, DVB, Leptospirosis, Brucelosis, Neosporosis, Campilobacteriosis y Tricomoniasis), las cuales pueden ocasionar aborto, nacimiento de terneros débiles que mueren a las pocas horas o días del parto y partos prematuros.
• Muertes al parto y durante el periparto por falta de atención al parto, mala posición del ternero al nacer, tamaño mayor de los terneros y/o área pélvica reducida.
• Poco personal asignado a la atención del parto.
• Animales predadores: cuervos, zorros, puma, etc.
¿Qué se puede hacer?
• Dar un refuerzo contra enfermedades reproductivas (IBR, DVB, leptospirosis) en todas las vacas y vaquillas al diagnóstico de preñez.
• Entrenar al personal de campo en la atención al parto.
• Separar vaquillonas de vacas, ya que las primeras requieren una mayor atención al parto.
• Se recomienda recorrer los lotes de parición por lo menos 4 veces al día en vaquillonas y 2 en vacas.
• Seleccionar toros con facilidad de parto.
• Seleccionar vaquillonas con el desarrollo adecuado antes del servicio.
• Evitar que las vacas pierdan o no ganen peso durante los últimos 90 días gestación, esto puede contribuir al nacimiento de terneros débiles. Por el contrario, una sobre nutrición en el último tercio de gestación incrementa el peso al nacer del ternero, incrementando los problemas de partos distócicos. A su vez, las vacas obesas al momento del parto presentan mayor dificultado en la parición por la reducción de canal del parto.
Entre el parto y los destetes
Se obtienen restando el porcentaje de terneros destetados al porcentaje de parición y el indicador no debería ser mayor al 2 al 3%. ¿Qué factores afectan a esta merma?
• Diarrea neonatal (coronavirus, rotavirus, criptosporidiosis y colibacilosis) que puede provocar muerte por deshidratación y septicemia.
• Infecciones en el ombligo (ocasionalmente, peritonitis y muerte).
• Mancha y muertes por Leptospirosis.
• Terneros aguachados producto de hembras con poco instinto maternal.
• Neumonías, siendo más importante después del destete.
¿Y se pueden disminuir estas pérdidas? Si. De hecho, en el trabajo realizado por los técnicos de Zoetis y asesores del Movimiento CREA se destacó:
• Entrenamiento al personal de campo, para detección y tratamiento temprano de enfermedades en los terneros.
• Vacunación en las hembras al final de la preñez contra diarrea neonatal.
• Desinfección del ombligo, por ejemplo, con tintura de yodo al 7%.
• Vacunación contra mancha en terneros 4 y 6 meses de edad.
• Eliminar las hembras que no criaron un ternero, de esta manera se disminuyen los animales con bajo instinto maternal.
Recomendaciones finales
La recolección de la información es valiosa para analizar en qué momento del ciclo productivo de la cría se producen las pérdidas o mermas. A partir de ello, se puede identificar, cuantificar y tratar el problema adecuadamente. Debido a que las mermas se producen en diferentes momentos y por diversas causas, es necesario trabajarlas de modo integral. Diseñar el plan de acción requiere el trabajo conjunto del empresario, el asesor veterinario y el personal de campo.
Resultados de la última encuesta SEA
Más de la mitad de los criadores planean retener vientres
“En 2018 la tasa de extracción de machos pudo haber alcanzado un nivel récord de 115%, lo que implica que se faenarán terneros una vez liquidado todo el stock anual disponibles de novillitos y novillos”. Así lo indicó Matías Bodini, integrante del área de Ganadería CREA, durante el último Desayuno Ganadero realizado en la sede porteña de la entidad.
En lo que respecta a la cría, durante este encuentro se destacó que los rodeos de empresas CREA se encuentran, en general, con buenas condiciones corporales y más de la mitad de los criadores consultados en julio pasado –en el marco de la última encuesta SEA– indicaron que tenían planes de retención de vientres, mientras que otro 36% dijo que mantendría su actual stock de vacas. “Cuando se consultó a los criadores CREA encuestados porqué tenían pesando crecer en vientres, la mayor parte dijo que era por una mejor perspectiva del negocio”, explicó Bodini. (Motivar)