por C.P.N. CARLOS SÁNCHEZ – ASESOR CONTABLE –
La pandemia del corona virus nos hace reflexionar sobre los conceptos que titulamos. En primer lugar, en este país, la mayoría de sus habitantes coincidimos en priorizar la salud y respetamos y respaldamos las decisiones del gobierno nacional; pero también hay un número creciente de ciudadanos que nos preguntamos ¿cómo transitaremos este camino de la cuarentena? y ¿cómo continuaremos una vez superado este difícil trance?
Por estos interrogantes generales es que resultan otros más específicos, también dudas y cuestionamientos que buscan dar mayor claridad, certidumbre, salida menos traumática de la crisis, menor caída de la actividad económica y paliar la carga sobre la clase media argentina que parece olvidada. Por lo expresado puntualizamos lo siguiente:
1.- ¿Cuál es la diferencia entre un monotributista categoría “A” y “B” y uno categoría “C”. en cuanto a ingresos la diferencia es insignificante; por ello no entendemos cuál ha sido el criterio para que unos reciban $ 10.000,- y otros no. En este régimen hay muchos cuentapropistas, tales como: electricistas, mecánicos, carpinteros, albañiles, pequeños comercios de ropa, calzado, librerías, jugueterías, etc. y profesionales (abogados, contadores, arquitectos, psicólogos, etc.) que si aportan en una categoría “C” o superior no tienen ese subsidio. Al mismo tiempo muchos de ellos tienen personal ocupado y que, al no poder trabajar, no saben cómo podrán pagar sus sueldos.
2.- ¿Cuál es la diferencia entre un cajero de banco y el de un supermercado? En nuestra opinión mucho más expuesto al contagio es del supermercado, pero los bancos permanecen cerrados y los comercios de alimentos y artículos de limpieza abiertos, como es obvio por otra parte.
3.- Nos enteramos con agrado que han sido repatriados 121 médicos argentinos que estaban trabajando en el exterior, la mayoría de ellos muy jóvenes. No deberíamos preguntarnos ¿Porqué se fueron? El costo educativo lo soportamos todos los argentinos que pagamos impuestos, inclusive atendiendo en la UBA una matrícula del 15 % de extranjeros. ¿No debemos analizar las condiciones que el mercado laboral le ofrece a los jóvenes egresados? Particularmente a los profesionales de la salud, cuando el sueldo de un médico en un establecimiento público ronda los $ 60.000,- y el de un diputado $ 200.000,-
4.- En la provincia de La Pampa la prestación del servicio eléctrico está en manos de Cooperativas (entidades solidarias sin fines de lucro) y el gobierno nacional dispuso que no puede haber cortes del servicio por falta de pago. Nos preguntamos ¿cómo harán éstas para pagar los sueldos y cargas sociales?¿Acaso la Administración Provincial de Energía (APE) flexibilizará los cobros y no cargaran intereses en caso de mora por parte de las Cooperativas?.
5.- Existe a primera vista una desigualdad en el empleado público y el privado. El trabajador estatal (municipal, provincial o nacional) tiene asegurado el cobro de su salario, aunque sea a través de la emisión monetaria. El trabajador privado no tiene esa seguridad, por más buena voluntad que tenga su empleador; ya que, por la cuarentena suelen tener actividad nula (por ejemplo los comercios mencionados en el punto 1, hoteles, restaurantes, etc.).
6.- Respecto del cierre de las entidades bancarias y la utilización de las tarjetas de débitos, hay que reconocer que muchos usuarios no disponen de dicha tarjeta y que, otros que la poseen, no saben usarla; sobre todo los adultos mayores.
7.- Se anunció créditos para Pymes al 24 % anual, pero los bancos continúan cerrados, en consecuencia ¿Dónde y cuándo se podrán gestionar los créditos?.
8.- Así como existen problemas financieros para pagar salarios, hay la misma dificultad para pagar los impuestos nacionales y la AFIP, a pesar de que la Federación Argentina de Consejos Profesionales en Ciencias Económicas envió una nota con fecha 18/03/2020 solicitando prórroga, no se ha expedido al respecto.
9.- En Canadá el estado se hará cargo (subsidio) del 75 % de los sueldos que deben abonar las pymes, para que no haya despidos. En nuestro país se exime de pagar la contribución patronal, en principio parece insuficiente para paliar la crisis financiera, al mismo tiempo que se amenaza a quienes despidan personal. Evidentemente no podemos comparar la economía de Canadá con la de la República Argentina, aunque esto tiene origen en el mal uso de los recursos que hace el estado nacional; ya que en 20 años casi triplico los ingresos en moneda constante, frente al crecimiento de la pobreza.
10.- En términos generales pensamos que se está castigando a la clase media argentina, aquella que otrora fue orgullo nacional, y con ello se la empuja a bajar escalones que puede concluir con mayor porcentaje de pobres. En consecuencia será más difícil la recuperación económica y evitar el aumento de la desocupación.
11.- Con la finalidad de no desatender la salud pública y paliar las consecuencias económicas con la humildad que nos caracteriza proponemos:
a) Extender los plazos para presentar la DDJJ y pagos de la AFIP por 60 días corridos, ya que los estudios contables no pueden trabajar y el 90 % de los contribuyentes, sobre todos los pequeños y medianos, dependen de ellos.
b) Otorgar un crédito por la suma a pagar por salarios de un trimestre a tasa cero (0 %), financiado a un año de plazo para evitar despidos y cierre de negocios y/o actividades.
c) Obtener recursos extras con la reducción de los sueldos de los empleados públicos en un 50 % con un mínimo de $ 50.000,- por el término de tres meses.
Ejemplos: Quien gane $ 75.000 – 25.000 = cobrará $ 50.000
Quien gane $ 100.000 – 50.000 = cobrará $ 50.000
Quien gane $ 120.000 – 60.000 = cobrará $ 60.000
Quien gane $ 160.000 – 80.000 = cobrará $ 80.000
Alguna vez el esfuerzo lo tendrán que hacer los políticos ¿No les parece?.