Luego que los gobiernos de Argentina y China firmaran en mayo pasado los protocolos que establecen la autorización de la exportación de carne bovina enfriada con y sin hueso y congelada con hueso, ahora el gigante asiático aumentó la habilitación de plantas que podrán exportar hacia el país asiático. Se trata de 26 frigoríficos bovinos, sumado a una planta de almacenamiento en frío y una planta avícola.
La noticia es importante para el país dado que hasta el momento los envíos eran sólo de carne congelada sin hueso y ahora se abre también el de enfriados, un mercado desconocido para las plantas locales. Se trata de un negocio de 700.000 toneladas anuales para este último rubro que compra China y por el cual se desembolsan alrededor de u$s3.000 millones.
Desde el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina, su presidente Ulises Forte señaló que «el anuncio es importante para la ganadería dado su desarrollo territorial puesto que va a generar empleo en las 24 provincias que viven de esta actividad».
En un comunicado de prensa, el secretario de Agroindustria, Luis Etchevehere, destacó que «de nuevo la carne, nuestro producto emblema, nos aporta buenas señales para la economía al incrementar las posibilidades de exportación al principal mercado del mundo».
Por su parte, el embajador Diego Guelar resaltó que «en el primer semestre de 2018 las exportaciones de carne vacuna argentina a China han aumentado un 119% en comparación a igual período del año pasado».
«Argentina ya ocupa el 20% de las importaciones chinas de carne vacuna y China compra a su vez el 55% de las exportaciones de carne nacionales», dijo el canciller.
Desde el consorcio de exportación ABC, su presidente Mario Ravettino, recordó que «se trata de un protocolo más exigente dado que China pide una serie de medidas sanitarias en aquellos campos con animales en donde se encuentre tuberculosis».
Desde otros sectores de la industria entienden que la «letra chica es complicada» de cumplir y por eso prefieren esperar a leerlo.