El Programa ProHuerta, desarrollado por el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y el INTA, entrega dos veces al año un kit de semillas hortícolas acorde a cada temporada. Cada kit contiene muchas semillas de distintas especies por eso es recomendable organizarlas para que sean bien utilizadas.
Una de las principales causas de falla en la huerta es que se desaprovecha el potencial de cada planta. Debemos tener en cuenta que una semilla dará origen a una planta y debemos evitar sembrar todas las semillas juntas en una sola vez, ya que podría fallar una siembra por diversos motivos (factores climáticos, excesiva profundidad de siembra, acceso de animales al sitio preparado, etc.) y se perdería así el insumo. De hecho las semillas pueden germinar, pero luego pueden no cubrirse los requerimientos que cada planta necesita en cuanto a espacio para su crecimiento y desarrollo, cantidad de nutrientes, agua y luz.
¿A que nos referimos cuando decimos siembras escalonadas?
Consiste en aprovechar la velocidad de crecimiento de algunas especies para obtener más producción en el mismo espacio. Hay hortalizas que se cosechan antes y otras tardan más para poderlas cosechar.
Otro aspecto a tener en cuenta es que podemos tener varias cosechas dentro de la misma temporada de un mismo cultivo, ya que al tener un rápido crecimiento, permiten ir sembrando antes de cosecharlas y sustituyéndolas cuando las hayamos cosechado.
Para lograr este suministro continuo de hortalizas debemos planificar cuándo y cuánto sembrar en función del espacio disponible y el consumo.
¿Cómo escalonar las siembras según la especie?
Para tener periódicamente en tu huerta cultivos de hoja que toleran trasplante como lechuga o acelga, se puede sembrar una o dos plantas y cuando éstas ya tengan sus primeras hojas, volver a sembrar otras dos y así sucesivamente. De esta manera aseguramos tener en todo momento una planta en crecimiento, otra en plantín para trasplante y otra lista para la cosecha. Otra alternativa para estas especies es hacer almácigos en contenedores.
En el caso de especies que no toleran el trasplante y que son especies de rápido crecimiento como el rabanito y la rúcula, se puede resembrar directamente en los espacios que se van cosechando y quedando vacíos.
Es importante:
– Conseguir las semillas con anticipación, lo ideal es autoproducirlas, luego verificar que no hayan perdido poder germinativo, realizando la prueba de germinación, en este sentido compartimos un tutorial para realizarla: https://www.facebook.com/prohuertalapampa/videos/291857965186535/
– Usar bien las variedades de cada especie según la temporada del año, por ejemplo para la acelga, hay variedades de invierno y variedades de verano.
– Planificar y diseñar la huerta servirá de guía para ver en proporciones cómo va a quedar la huerta al momento de sembrar, con todos sus componentes: canteros, almácigos, abonera, caminos, invernadero, cerco, etc. Resulta de gran ayuda el registro de las fechas de siembra en cuadernos de campo o planillas.
-Acondicionar los almácigos en los meses más fríos con polietileno o malla anti-helada y en los meses más calurosos colocar tela media-sombra.