Stoller Argentina es una compañía internacional que hace 20 años que está instalado en la Argentina. Ya se afianzó en el norte del país y ahora va en busca de la pampa húmeda con el fuerte de la empresa: la fisiología y nutrición vegetal.
Así lo hizo saber Ignacio Moyano, gerente general de la firma. “El futuro va a venir por los biológicos”, aseguró el directivo durante un encuentro organizado por la empresa con periodistas.
Neutral o Niño débil: buenas perspectivas para la campaña
Mirá también
Neutral o Niño débil: buenas perspectivas para la campaña
Stoller, que tiene sede mundial es Houston, Estados Unidos, y tiene actividad en 50 países del mundo, proyecta facturar en Argentina U$S 22 millones este año. La soja explica el 45% de las ventas. Luego, siguen maíz y trigo pero también tienen gran participación en las economías regionales, sobre todo en los cítricos.
Uno de los pilares para abarcar todo el país es la planta que tiene la empresa en Córdoba, que fue inaugurada en 2012 y tiene una capacidad de producción mensual de 1,5 millones de litros. Además, también exportan productos a Chile yColombia. “Las próximas inversiones estarán destinadas a eficientizar la planta”.
Según comentó Moyano, la empresa ha logrado comprender “el lenguaje de las plantas” a través de la estructura mundial, contando con habilidades necesarias para desenvolver investigaciones integradas en varios países. “El estrés es una de las preocupaciones más grandes. Y estamos trabajando para que haya soluciones para hacer frente a cualquier tipo de estrés tanto biótico como abiótico. Si la planta está bien nutrida, estará en mejor condiciones para enfrentar cualquier tipo de estrés. ”, destacó el directivo, quien agregó con estas tecnologías se puede incrementar el rinde de los cultivos un 10%. “Es muy bajo el uso de esta tecnología.Argentina viene demorado. Es uno de los países que menos fertiliza”.
La competencias en el mercado local de Stoller Argentina son Yara, Arysta y Compo, entre las empresas principales.
En un futuro, Moyano remarcó que están trabajando en la Argentina para desarrollar herbicidas biológicos para las malezas, uno de los mayores flagelos que está teniendo la agricultura. Esta tecnología puede estar en 5 a 7 años disponible en el mercado y desde su planta de Córdoba se difundirá a nivel mundial.
La firma fue pionera en la promoción de los biorreguladores, desde principios de este siglo, con su producto Stimulate como ícono que abrió caminos.